Nuestra Tecnología

 

Sensores Inteligentes

 

Los productos I-ON incluyen diferentes sensores especialmente desarrollados por Alteria Automation que miden en tiempo real variables ambientales como niveles de Dióxido de carbono, temperatura, humedad, partículas en suspensión, y contaminación del aire. Además, los sensores miden los niveles de radiación UV-C.

A través de un algoritmo que mide en cada momento la información de los sensores, se ajusta el proceso de irradiación. De esta forma, se garantiza la efectividad del proceso de desinfección. En los equipos de otros fabricantes se desconoce el resultado del proceso.

Asimismo, I-ON, incluso ante una remota desviación de los estándares que impidiera que el ciclo de desinfección se pudiera realizar correctamente, activa un mensaje de alarma al usuario que proporciona un mantenimiento predictivo avanzado antes de que ocurra un fallo.

Smart Sensors
Traceability

Trazabilidad en tiempo real

 

I-ON es la solución que ha resuelto uno de los mayores problemas relacionados con el proceso de desinfección.

Hospitales, oficinas, fábricas, centros educativos, residencias para la tercera edad, restaurantes, centros comerciales, zonas para eventos, teatros, cines, polideportivos, entre otros espacios.

La pregunta es siempre la misma:

¿Está realmente desinfectado el lugar?

Confirmar que el proceso de desinfección se ha realizado correctamente es tan importante como hacerlo. De nada vale adquirir un equipo de desinfección si se desconocen sus resultados. La trazabilidad en tiempo real de I-ON, es única. Los datos del proceso de desinfección se transmiten automáticamente a un servidor en la nube para proporcionar trazabilidad al proceso.

 Tecnología de desinfección reconocida internacionalmente

La desinfección UV-C y el ozono está recomendada por organismos internacionales como la OMS, la EPA (Agencia Americana de Medio Ambiente) y el Ministerio de Sanidad de España, entre otras organizaciones, para su uso contra las infecciones transmitidas por el aire.

Desinfección por UV-C

Los efectos destructivos de la radiación Ultravioleta de campo profundo (UV-C) se conocen desde 1928.

La energía Ultravioleta genera la alteración de los enlaces del Uracilo, uno de los componentes de los virus ARN (Coronavirus).

El proceso llamado dimerización impide la reproducción del virus, anulando el proceso de infección que se basa en la multiplicación del virus mediante la fijación a una célula huésped.

La imagen representa la dimerización del Uracilo en el ARN de un virus producida por la radiación UV-C.

Desinfección por UV-C + Ozono

En las emisiones en longitudes de onda Ultravioleta comprendidas entre 175 y los 210 nm se produce una fuerte ionización del aire. El nivel de energía fotónica es tan elevado que la estructura molecular del aire se rompe y se separa en iones positivos y electrones.

Este efecto crea moléculas de gas Ozono O3, compuesta por 3 átomos de Oxígeno inestables que tienden a captar electrones de cualquier compuesto que se le aproxime para recuperar su estabilidad. De ahí su alto poder oxidativo y desinfectante.

El ozono destruye así la membrana que envuelve el núcleo de los virus y las bacterias.

Desinfección por UV-C + Ionización

Un ion es una molécula que ha alterado su carga natural. Está cargada porque el número de electrones no coincide con el número de protones estable.

Un ion es un radical altamente inestable y una partícula muy reactiva que se combina fácilmente con casi cualquier cosa a su alrededor.

El proceso de ionización del aire produce cambios en la electroquímica de las partículas que están suspendidas. La ionización destruye patógenos, incluidos virus y bacterias, al alterar la membrana celular.

I-ON vs otros sistemas de desinfección